Cualquiera que haya sido diagnosticado con presión arterial alta y haya sido informado de los peligros por el médico, por supuesto que le gustaría hacer algo por sí mismo para evitar más daños en el sistema vascular y mejorar su propio estado de salud.
Ajustar tu dieta es el primer paso
Con una dieta saludable, puedes hacer una contribución específica para reducir la presión arterial y posiblemente incluso normalizarla. Un estudio realizado por el Congreso de la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA) de 2017 muestra que la mayoría de los pacientes pueden lograr una reducción significativa de la presión arterial simplemente cambiando su dieta.
En muchos casos, la presión arterial alta es una consecuencia a largo plazo de no hacer suficiente ejercicio y comer demasiado. Este estilo de vida conduce a la obesidad con el tiempo, lo que a su vez aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular.
Bajar de peso puede ayudar, porque por cada 10 kilogramos de pérdida de peso, la presión arterial también desciende alrededor de 12:8 mmHg (= unidad de medida para la medición de la presión arterial).