Muchos son los beneficios emocionales y para la salud que nos aporta tener un perro o un gato. Las mascotas ayudan a disminuir la depresión en personas mayores, así como las crisis hipertensivas, reducen el estrés y se consideran parte de la familia y como tal nos gusta tratarlos. Son generalmente muy consentidos y a la hora de dormir algunos prefieren sus camas, pero otros duermen con sus dueños.
Se estima que un 33% de las personas que tienen mascotas duermen con ellos, y esta incidencia aumenta cuando se trata de que la mascota es un gato o en el caso de perros de raza pequeña. En Reino Unido, por ejemplo, diversos estudios arrojaron que hasta un 41% de las personas con mascotas compartían la cama.
¿Es perjudicial dormir con tu perro?
A pesar de que muchas personas acostumbran a dormir con sus mascotas, bien sea un perro o gato, muchos investigadores coinciden en que esta práctica puede ser perjudicial para la salud. Esto se debe a la gran cantidad de enfermedades que pueden transmitirte tu mascota.
Esto puede variar según la especie y sus hábitos, como por ejemplo, aquellos casos en los que salen a la calle para hacer sus necesidades fisiológicas o a pasear. En el caso de los gatos, si es un gato que tiene acceso libre de entrar y salir de su casa, este puede traer enfermedades adquiridas en estos paseos, así como parásitos.