Nunca se es demasiado viejo para andar en bicicleta: el deporte al aire libre mantiene el cuerpo y la mente jóvenes, fortalece la salud mental y social, promueve la movilidad y facilita la vida cotidiana. Además, la tensión en las articulaciones es menor que, por ejemplo, al correr. Andar en bici tiene muchos beneficios para mayores.
Aquí puede descubrir cómo puede mantener una buena figura en una bicicleta incluso cuando envejece, cómo puede organizar su entrenamiento de manera efectiva y qué beneficios para la salud se derivan de ello.
Ciclismo: entrenamiento suave para las articulaciones en la vejez
Instituciones como los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), que están intensamente involucrados en la prevención de enfermedades, recomiendan andar en bicicleta a un ritmo moderado como un ejercicio suave para las articulaciones: la mayoría de las otras formas de movimiento ejercen mucha más presión sobre el articulaciones.
Estos incluyen principalmente jogging, tenis, fútbol o squash, pero las formas «suaves» de ejercicio como la marcha nórdica o el golf también ejercen presión sobre nuestras articulaciones. Por otro lado, si vas en bicicleta a una velocidad de hasta 20 kilómetros por hora, que puede hacerte sudar, estás haciendo algo bueno por tu salud y al mismo tiempo cuidando tus articulaciones.