Todos enfrentamos tiempos difíciles en nuestras vidas, momentos en los que perdemos a personas que amamos. Este es uno de los momentos más difíciles de enfrentar porque es imposible calcular el daño que la separación causa. Muchos recurren a la ayuda de amigos y familiares. Sin embargo, hay veces que nuestras redes no son suficientes para ayudarnos a salir adelante. Estas situaciones exigen que busquemos otras alternativas y una de ellas es la psicología. La psicología nos ayuda a afrontar la pérdida y acompañar el proceso de recuperación cuando los demás no pueden.
Los psicólogos comprenden los dolores emocionales que la pérdida de un ser querido trae, ofreciendo herramientas para enfrentarlas de la mejor manera. Estas herramientas utilizan técnicas como el mindfulness, la terapia cognitiva y la terapia conductual para aprender a manejar la tristeza, el miedo, la ansiedad, el enojo o la soledad que se siente después de la pérdida irreparable de una persona amada. La primera etapa para superar una pérdida es intentar entender el dolor.
Reconoce tu dolor
Uno de los primeros consejos que un psicólogo nos dará es reconocer el dolor que sientes por la pérdida. Esto te permitirá comprenderte a ti mismo de una manera mucho más profunda, entendiendo los pensamientos y comportamientos que te afectan. Ni siquiera los más experimentados pueden evitar sentir dolor, por lo que es mejor aprender a admitirlo y siempre es bueno compartir tus sentimientos con alguien que podrá apoyarte y ayudarte. La segunda etapa para superar una pérdida es hablar tu dolor.
Expresar tus emociones es una etapa fundamental para superar una pérdida. No es un proceso fácil, ya que tendrás que hablar de aquella persona que se fue, volviendo atrás en el tiempo y recordándote a ti mismo cómo era esa persona, los tiempos felices que pasasteis juntos y los sueños que teníais para el futuro. Esto requiere de una gran dosis de coraje para dar voz a los sentimientos que has estado guardando.
Habla de tus sentimientos con quienes desees, algunas personas encuentran mayor ayuda hablando con desconocidos, ya que te pueden brindar nuevos entendimientos, o pueden simplemente escuchar y validar lo que sientes. Si no tienes a nadie con quien hablar, busca grupos de apoyo o servicios de consultas para recibir apoyo profesional. La tercera etapa de superar una pérdida es aceptar el dolor.
