Cada año millones de personas en el mundo pueden llegar a sufrir diferentes enfermedades de transmisión sexual. Conocidas también como ETS, estas son infecciones qué se transmiten de persona a persona mediante la actividad sexual de tipo oral, vaginal o anal; y sí bien, algunas de estas enfermedades suelen presentar síntomas, la verdad es que algunas de ellas pueden encontrarse presentes de manera silenciosa.
Ya que algunas son asintomáticas, es necesario llevar una vida sexual saludable para poder evitar el contagio y transmisión a un número mayor de personas. La mayoría de estas enfermedades son fáciles de tratar; por lo tanto, un diagnóstico temprano puede ayudarte a mejorar tu salud y eliminar posibles complicaciones futuras. Conoce cuáles son aquellas que más se contagian y también, cómo puedes evitarlas.
Qué son las enfermedades de transmisión sexual
Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) también conocidas anteriormente como enfermedades venéreas, son aquellas cuya transmisión se lleva a cabo de persona a persona y principalmente a través del contacto sexual.
Generalmente, estas enfermedades se transmiten a través de los fluidos sexuales, tales como el semen, el líquido preeyaculatorio, las secreciones vaginales y la sangre. En algunos casos, estas enfermedades pueden llegar a contagiarse también a través de otros mecanismos, tales como compartir hojillas, agujas y otros objetos que faciliten la interacción con los fluidos sexuales o sanguíneos. También es posible encontrar enfermedades de transmisión sexual que se transmiten de la madre al feto.
