¿Ruido en tu puesto de trabajo? Aquí vuelve a sonar el teléfono. Allí la fotocopiadora y la impresora trabajan constantemente.
Los colegas hablan sobre el fin de semana maravillosamente soleado, riéndose a carcajadas, mientras pasan frente a sus escritorios camino a la cocina del café. Y frente a la ventana de la oficina, un camión se descarga con un estruendo. La vida cotidiana en muchas oficinas diáfanas.
¿Por qué el ruido te enferma?
El ruido puede dañar la audición directamente. Por ejemplo, los ruidos muy fuertes y de corta duración por encima de los 120 decibelios causan daños auditivos agudos. Sin embargo, los expertos advierten que el ruido constante de 80 decibelios también puede provocar daños auditivos.
Además, el ruido supone estrés para nuestro organismo. La hormona del estrés liberada como resultado conduce a un aumento de la presión arterial y hace que aumente la frecuencia cardíaca. El ruido persistente nos produce dolores de cabeza, pero las alteraciones del sueño y las molestias gastrointestinales también son síntomas típicos de la contaminación acústica.